Página 22 - Revista Hall 38ª Edição - Maio 2014
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Os dois últimos pavilhões foram dedicados ao
entretenimento, um aspecto marcante do período.
Espetáculos de ópera, teatro, circo e de cabaré
abundavam para deleite e prazer de uma sociedade
ansiosa por diversão. As famosas casas de espetáculo
como o Folies Bergere, o Moulin Rouge e o Le Chat Noir,
que foram tema de pintores como Toulouse-Lautrec,
são ali homenageadas, templos onde os parisienses se
entregavam à mundanidade, afogavam as mágoas no
absinto, enchiam os olhos nos espetáculos das bailarinas
de cancan e se deixavam sucumbir ao carisma de uma
Sarah Bernhardt que tanto sucesso fez com suas peças
Les amours de la reine Élisabeth e Jeanne Doré, entre
tantas outras. Ao visitar e vivenciar a exposição vai
ser possível ao público entender porque Paris e seus
habitantes, nesse início de século, acreditavam piamente
que a cidade seria para sempre a capital do mundo
e dos prazeres. Nem sequer a proliferação de bordéis
e da prostituição que tanto marcaram o período tirou
de Paris nesse momento a fama de cidade do luxo
e da recreação.
No entanto, se o mito da Belle Époque perdurou
até nossos dias, não terá sido apenas pelo contraste
com os horrores da Grande Guerra que a sucedeu,
mas porque, sem dúvida nenhuma, se apoiou numa
efervescência cultural, estética e progressista
cuja força, energia e qualidade a atual exposição
consegue plenamente reconstituir.
PARIS 1900 - A CIDADE ESPETÁCULO
PETIT PALAIS – PARIS – FRANÇA
ATÉ 17 DE AGOSTO 2014
Se dedicaron los dos últimos pabellones al
entretenimiento, un aspecto impactante del periodo.
Espectáculos de ópera, teatro, circo y de cabaret
abundaban para deleite y placer de una sociedad
ansiosa por diversión. Las famosas casas de espectáculo,
como el Folies Bergere, el Moulin Rouge y el Le Chat
Noir, que fueron tema de pintores como Toulouse-
Lautrec, reciben homenaje allí, tiempos en los que
parisienses se entregaban a la mundanidad, ahogaban
las tristezas en el absinto, llenaban los ojos en los
espectáculos de las bailarinas de cancán y se dejaban
sucumbir al carisma de una Sarah Bernhardt, que
tanto éxito tuvo con sus piezas Les amours de la reine
Élisabeth y Jeanne Doré, entre tantas otras. Al visitar y
vivir la exposición, será posible que el público entienda
porqué París y sus habitantes, en ese inicio de siglo,
creían piamente que la ciudad sería para siempre
la capital del mundo y de los placeres. Ni siquiera la
proliferación de bordeis y de la prostitución, que fueron
tan significativos en el periodo, sacó de París en ese
momento la fama de ciudad de lujo y de la recreación.
Sin embargo, si el mito de la Belle Époque perduró
hasta nuestros días, no habrá sido sólo por el contraste
con los horrores de la Gran Guerra que la sucedió,
sino porque, sin ninguna duda, se apoyó en una
efervescencia cultural, estética y progresista cuya
fuerza, energía y calidad la actual exposición
logra plenamente reconstruir.
París 1900 - La Ciudad Espectáculo
Petit Palais – París – Francia
Hasta el 17 de agosto 2014
CRÉDITO FOTOS: DIVULGAÇÃO PETIT PALAIS / RICARDO MANGOLD
TOULOUSE-LAUTREC
AMBROISE VOLLARD - PAUL CÉZANNE (1839-1906)
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De Estilo e Olhar /
De Estilo y Mirada
