Revista Hall 42ª Edição - Junho de 2015 - page 19

RE-CORD III
En Estados Unidos, país menos
tradicionalista que Japón, vio nuevas
formas de pensar la cestería y notó que era
posible abordar de otra forma la materia,
los aspectos de materia, proporción y
volumen en el espacio. Allí también pudo
desarrollar una nueva visión sobre la
cestería tradicional de diferentes pueblos,
y trató de ver de qué modo podría, con sus
propias manos, modificar aquello que la
naturaleza produce. Una exposición en
Estados Unidos, cuando vivió en Riverdale,
cerca de Nueva York, donde les pedía a los
vecinos que le pasasen material desechado
en los jardines, recibió justamente el
nombre de “Naturaleza Transformada”. Un
nudo o un trenzado que haga en el bejuco
no serán algo común o banal. Habrá sido
algo ensayado en el perfeccionamiento
de sus propios métodos que, como ella
lo explica, son menos regulares, menos
económicos y más ambiguos. El factor
imprevisto está siempre presente, pues la
naturaleza “es imprevisible”. Reconoce
que hay conflictos entre la intención y
aquello que el material permite, y es allí
que está su búsqueda por potenciar al
máximo sus posibilidades. Apenas cuando
la artista se siente cómoda con el diálogo
entre el material y la técnica es que da
por terminada una obra y la coloca a
disposición, firmada, de alguna galería
o exposición.
Su trabajo está mencionado en
varios libros, como el “Contemporary
International Basketmaking” de Mary
Butcher, en “Contemporary Japanese
Sculpture”, en que la autora, Janet Koplos,
afirma que el trabajo de Hisako Sekijima
“no puede ser visto física o conceptualmente
a no ser como escultura”.
En 1980, Hisako y su esposo regresaron a
Japón después de haber vivido en Estados
Unidos. Con muchas ideas y animada,
pasó a dictar clases en la Escuela Textil
Kawashima, de Kioto, y en la Escuela
Kenkyujo, en Tokio. Intentaba introducir
en los alumnos una nueva actitud con
relación a la cestería japonesa y hasta hoy
cuenta con seguidores en ese camino más
de exploración y muchos de sus ex alumnos
llegaron a exponer sus trabajos al lado de
los de ella. En el libro “Cestos, redefiniendo
volumen y significado” (en traducción
libre), Pat Hickman, al referirse a la forma
como Hisako enseña explica que ella hacía
con que sus alumnos estudiasen de forma
muy cuidadosa, con una mirada menos
antropológica y más conceptual.
En 1986, Hisako Sekijima publicó su
primer libro en inglés, “Basketry: Proyectos
de cestos a chinelas de césped” (en
traducción libre). El texto revela su pasión
por la comprensión de cómo abordar el
material de la naturaleza y su capacidad
para articular su pensamiento. En 2001,
después de haber pasado un año en
Francia, la artista realizó la curaduría
de los participantes japoneses para una
exposición en Connecticut, Estados Unidos,
llamada “Japón: bajo Influencia”. En
el texto de presentación, ella incentiva
una comparación entre los cestos
contemporáneos y los cestos de bambú sin
función específica, aquellos que examinan y
proponen una actitud nueva con relación al
material. Habla sobre la forma como estos
cestos son creados y los temas confrontados
por los artistas que siguen los antiguos y los
nuevos caminos. Muestra la importancia
de enfocar la energía en el trabajo, que
abarca una posición que es, al mismo
tiempo, cerebral y emocional. Tal vez sea
esa la combinación que hace con que
Hisako Sekijima se distinga como artesana,
escritora y curadora. Y lo que transforma,
definitivamente, en una artista plástica
dictada por la naturaleza.
Articulada, Hisako Sekijima resume
así su trabajo: “Desde hace años vengo
explotando el potencial visual y filosófico
de la cestería. Especialmente, me interesa,
de forma simbólica, cómo el movimiento
de líneas alrededor de un espacio negativo
estará redefiniendo un volumen y, al mismo
tiempo, incorporando mi pensamiento.
Incluso una simple forma geométrica como
un cubo o una esfera se puede transformar
en tipos diferentes de objetos. Siempre
me sorprende que la materialidad de una
rama de árbol o de una trepadera pueda
transformarse en un complejo sistema,
con un lenguaje propio mío, después de
trabajados con mi forma de conceptualizar
el cesto o la cestería.
19
1...,9,10,11,12,13,14,15,16,17,18 20,21,22,23,24,25,26,27,28,29,...100
Powered by FlippingBook